SAGRADOS CORAZONES - HILO DORADO Copiar
Nazaret
Medidas: 56x38cm <br><br>“Corazón de Jesús, yo te adoro; <br>Corazón de María, yo te imploro;<br> Corazón de José, puro y justo; <br>en estos tres corazones pongo mi confianza.”<br><br>El cuadro de los Tres Corazones de la Sagrada Familia nos introduce en el misterio santo del hogar de Nazaret, donde Dios quiso habitar entre nosotros. El Sagrado Corazón de Jesús, revelado con amor a Santa Margarita María de Alacoque en el siglo XVII, palpita con el fuego de la misericordia divina y la redención. El Inmaculado Corazón de María, dado a conocer en Fátima en 1917 a los pastorcitos —especialmente a Lucía—, resplandece con su pureza, su docilidad al Espíritu Santo y su maternidad espiritual sobre toda la Iglesia. Y el Casto Corazón de San José, protector de Jesús y de María, nos recuerda su fe firme, su obediencia silenciosa y su misión confiada por Dios de custodiar aquello que es sagrado.<br><br>Recibir este cuadro en el hogar es acoger la bendición de la Sagrada Familia de Nazaret y pedir su intercesión constante.
Sagrado Corazón de Jesús
Medidas: 31x31cm <br><br>“Sagrado Corazón de Jesús, en ti confío.”<br><br>La devoción al Sagrado Corazón tomó nueva fuerza en el siglo XVII, cuando Jesús se apareció a Santa Margarita María de Alacoque. En esas revelaciones, Él le mostró su Corazón ardiente, envuelto en una llama viva de amor, coronado de espinas y traspasado por la entrega total. Le pidió que difundiera este mensaje de misericordia para que el mundo descubriera cuánto ama, cuánto perdona y cuánto espera.<br><br>En cada aparición, Jesús reveló el anhelo profundo de su Corazón: que toda alma encontrara en Él un refugio seguro, un descanso para sus heridas y una fuente inagotable de paz. Desde entonces, su Corazón permanece abierto, latiendo con ternura divina, invitando a confiar, a volver y a dejarse amar.
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